Tamaño de fuente A-AA+
El examen requiere un ayuno previo de 8 a 12 horas como mínimo. Se toma una muestra de sangre y es analizada para verificar los niveles de glucosa en la misma. Tras esta primera revisión, al paciente se le administra (de forma oral) una sustancia con alto contenido de carbohidratos y una concentración de glucosa. Cuando es administrada a mujeres embarazadas, la concentración de glucosa en la solución es de aproximadamente 100 gramos, pues dada la enorme cantidad de producción de hormonas en el cuerpo por el proceso de gestación, es necesario ampliar el rango de reacción al azúcar.
Dos horas después de tomar la solución, vuelve a tomarse una muestra de sangre del paciente y ésta es analizada para verificar los niveles de glucosa. Los resultados de esta prueba se definen en los siguientes rangos:
Menor a 140 mg/dl |
Rango normal de glucosa en sangre. |
140 – 200 mg/dl |
Rango de prediabetes. |
200 mg/dl o mayor |
Rango de diabetes. |
Si tras dos horas de haber sido administrada la solución oral se encuentran valores de 200 mg/dl o superiores, se indica la existencia de diabetes. Sin embargo, al igual que la prueba de glucosa plasmática en ayunas, es necesario realizar una segunda aplicación de esta prueba en días posteriores y siguiendo el mismo método, de otra forma, no se puede asegurar el diagnóstico.
Esta misma prueba puede ser aplicada antes de la semana 24, si el médico detecta factores de riesgo o características que puedan evidenciar presencia de prediabetes o diabetes en la madre.
Otra prueba de posible aplicación es la de glucosa aleatoria, pero no se considera confiable por las alteraciones hormonales que hay en el embarazo.